¿A quien no le gusta ir de compras por la mañana, caminar con un montón de bolsas en las manos?. Felicidad pura. Pero hay que reconocer que el otro gran momento es cuando por fin te sientas un rato para comer. Uno de los barrios por excelencia para quemar una tarjeta Visa es el de Salamanca en Madrid, donde se codean todas las grandes marcas.
Babú Magazine ha visitado para vosotros algunos de los restaurantes del barrio de Salamanca.

Empezamos por el restaurante de Cristina Oria.
Situado en la calle Conde de Aranda,6 muy cerca de la calle Serrano. Un concepto muy cuidado con una tienda en la planta de abajo donde podrás comprar queso, comida «gourmet» y un montón de gadgets o ideas de regalos para la cocina.
El restaurante de Cristina Oria esta en la planta de arriba. La decoración es de buen gusto, nada que reprochar. El espacio coquetón esta dividido en dos salas. Hay unas mesas para dos personas que dan a la calle y que relajan mucho por la tranquilidad del sitio.
Como podéis ver en el restaurante no falta un detalle, la vajilla es preciosa.
Los camareros también perfectos, profesionales, educados, con estilo.

En cuanto a la comida todo estaba bien, os recomendamos el foie, especialidad de la casa. En resumen: el restaurante de Cristina Oria es un lugar muy recomendable.
En el número 11 de Velázquez: el restaurante Bump Green
Llama la atención por su aire eco. Igualmente tienen una carta con platos vegetarianos y sin gluten. Ideal para controlar las calorías y comer sano. Podréis elegir, por ejemplo, entre unas cuantas ensaladas, pasta de calabacín, burger de quinoa …todo esto bebiendo un anti-aging smoothing.
El espacio no es demasiado grande así que es mejor reservar mesa.
Y a la salida hasta podréis adquirir algún producto bio.
También hemos probado el Velázquez,17 .
La decoración es estilo bistrot. Quizás las mesas demasiado juntas, lo que impide la intimidad.
El servicio estuvo correcto, el ambiente agradable, buena música. Bien, aunque no inolvidable.

La comida acertada tanto en la presentación como en el gusto.

De entrada hemos compartido una berenjenas crujientes servidas con humus y miel. De segundo una milanesa de ternera con rucola y una pallarda de pollo a la plancha. La verdad es que para comer estilo italiano mejor cruzar la calle y comer en el restaurante Ornella
La cuenta parados personas muy razonable: 48 euros, pero sin postre.
+ info y reservas

Restaurante la Maruca.
Un poco más adelante en la misma calle Velazquez, exactamente en el número 54 encontrareis La Maruca, un restaurante gestionado por grandes profesionales de la hostelería de Santander.
Por lo visto el sitio esta casi siempre lleno. Siendo solo dos nos colaron en el primer servicio pero nos pusieron en una mesa demasiado cerca de la cocina. No muy agradable, la verdad.

En cuanto a la comida, después de compartir unas alcachofas a la plancha que no tienen nada que ver con las del restaurante Petit a Petit, hemos probado unos chipirones en su tinta (regulares) y un cordero al horno de calidad pero demasiado salado.
Cantidad un poco escasa en los dos platos. Mejor no llevar a tu primo el de Bilbao que se puede ir de ahí con un poco de hambre.

En cuanto a la tarta de limón, de la cual somos especialistas mundiales, podemos comentar que tenia un aspecto increíble pero al final hemos llegado a la conclusión que las de masa fina son mucho mejores.

La cuenta suma 62,10 euros. + info y reservas
En línea con los restaurantes de este tipo en la capital. Anota que esta gente tienen dos restaurantes más en Madrid, «La Primera» que esta situado en un sitio emblemático de la Gran Vía al mismo numero 1 y «La bien parecida» en la calle Jorge Juan.

Ahora vamos a por el callejón de Jorge Juan.
Ahí tuvimos la mala idea de reservar en el Babelia , ahora se llama Taberna de los Gallos. Un domingo a mediodía. Mala idea porque el sitio es bastante grande y estaba lleno, si te gusta comer con tranquilidad, este día no era el día.
La decoración es bastante acertada, muy del ambiente del momento. Mucha madera, algún detalle, correcto pero tampoco nada excepcional.
En cuanto a la comida elegimos entre otras cosas unos rollitos de primavera y luego un pescado con verduras. Faltaba fineza. Todo bastante decepcionante.
Ahora que han cambiado a Taberna Los Gallos quizás esté todo mejor, si quereís probar aquí+ info y reservas
Restaurante el Tenderete
También en pleno barrio de Salamanca encontramos el Tenderete, con su cocina viva, de mercado, pensada para compartir…uno de los mejores afterwork de esta sofisticada zona de Madrid.
Lo mejor es que esta siempre abierto, o casi, y su cocina non- stop lo convierten en el sitio ideal para los que se olvidan de reservar y quieren comer tarde.
Por la noche puedes disfrutar de los mejores platos o tomar una exquisita copa después de cenar. Otro punto positivo, tiene una terraza cubierta muy acogedora.

C/ Dr Castelo, 13 + infos y reservas

En fín, hemos llegado a la conclusión que con un buen día de sol la mejor opción es comer en la terraza del Cappuccino de la Plaza de Independencia, donde el servicio es siempre irreprochable, la comida buena (aunque echamos de menos algunos platos «lights») y las vistas sobre la Puerta de Alcalá únicas.
Ahí solemos compartir la ensalada Kale, los Springrolls y la hamburguesa casera, con cafés y bebidas la cuenta ronda los 60 euros.
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