
El Pirineo de Girona es único, no solo por su situación geográfica a los pies del mar mediterráneo, sino por su amplia oferta de estaciones de esquí: cuatro de esquí alpino- La Molina, Masella, Vall de Núria y Vallter 2000- y una de esquí nórdico, Guils Fontanera, que ofrecen más de 200 kilómetros de pistas y equipamientos de primer nivel, con un total de 356 pistas señalizadas de distintos niveles.
Ofrecen circuitos para raquetas, esquí nocturno y rutas para practicar esquí nórdico. Estaciones familiares que vinculan la práctica del esquí, del deporte y el ocio. En la actualidad las instalaciones aplican normas y medidas, como la digitalización de los servicios, para garantizar la seguridad de los usuarios y trabajadores.
Cinco estaciones de esquí en el Pirineu de Girona
La Molina, la estación pionera del esquí en Cataluña
Situada en la comarca de la Cerdanya, La Molina es una de las estaciones históricas de nuestro país. Pionera en los deportes de invierno, fue la primera estación en España en instalar un remonte mecánico. En la actualidad, La Molina se ha convertido en una estación moderna que dispone de una gran oferta deportiva, lúdica, gastronómica y hotelera para satisfacer los gustos de todos sus visitantes.
Además, se pueden vivir experiencias que van más allá del esquí, como ejemplo, participar en un escape room “alerta avalancha” en La Molina, única en los Pirineos, en los que durante una hora se busca, comprende, analiza y encuentran los indicios y códigos para rescatar a una persona en un simulacro de avalancha. Una forma amena y diferente de conocer los elementos imprescindibles para la búsqueda en rescates de montaña ante estas situaciones.
También se puede realizar una divertida excursión en raquetas de nieve, durante la cual, el monitor guía al grupo siguiendo las huellas en la nieve y los nidos del pájaro carpintero.
Masella, la capital del esquí nocturno de los Pirineos
Ubicada también en la Cerdanya y rodeada de un precioso bosque, la estación de Masella cuenta con 74 Km esquiables y pistas adecuadas a todos los niveles de aficionados y profesionales. Ofrece un forfait para esquiar en La Molina y que, junto con esta, forman el dominio de 135 km esquiables Alp2500.
Uno de los grandes atractivos de La Masella es que es de las pocas estaciones en las que se puede vivir la experiencia del esquí nocturno. Con 10 km de pistas, es la única oferta de esquí de noche del Pirineo de Girona.

Vall de Nuria, un valle único los 365 días del año y referente medioambiental
La estación de esquí y montaña de Vall de Núria está situada en la comarca de Ripollès. Con una riqueza natural y paisajística única y dominando uno de los puntos más elevados de la Vall de Ribes, Vall de Nuria está rodeada por picos de casi 3.000 metros, en donde nacen multitud de fuentes y torrentes de agua.
Una experiencia imperdible es sin duda, subir al tren cremallera, que este año conmemora su 90º aniversario con una exposición, y en el que, durante su recorrido de 12,5 km y ascenso a más de 1.000 metros, se pueden admirar unas maravillosas vistas.
Otras experiencia singular en Vall de Núria es la que se puede realizar durante las noches de luna llena, ya que se pueden ver las estrellas a bordo de una pisa nieves o también aprovechar las salidas nocturnas en raquetas de nieve que organizan de forma continuada.
Vallter 2000, la estación de los pequeños detalles
Situada también en la comarca del Ripollès, Vallter 2000 es la estación de esquí más oriental de los Pirineos catalanes. Desde su cota más alta, 2.535 metros, se puede incluso ver el mar Mediterráneo en los días despejados. Está situada en un entorno único, con paisajes de una belleza incomparable, en medio del circo de origen glaciar de Morens-Ulldeter y a 2.000 metros de altitud sobre el valle del río Ter, dentro del Parque Natural de las Cabeceras del Ter y del Freser.
Una experiencia divertida para toda la familia que se puede realizar en esta estación es la bajada en trineos, ya que dispone una zona de descenso exclusiva para ello. Una aventura que comienza en el mismo ascenso, a través de la cinta transportadora. Una manera, sin duda, diferente de pasar un día en la nieve.
Guils Fontanera, naturaleza y deporte slow
La estación de Guils Fontanera, en la Cerdanya, es ideal para los aficionados al esquí nórdico. Gracias a su ubicación, en una vertiente de influencia atlántica, cuenta con más tiempo de permanencia de la nieve. Cuando el centro está a pleno rendimiento, ofrece hasta 34 km de pistas. Desde esta estación, se pueden disfrutar de unas magníficas vistas panorámicas de todas las cimas y del valle de la Cerdanya.
Cerca de esta estación el vall de Font Viva se puede vivir otra experiencia inolvidable, como es realizar un paseo sobre la nieve en raquetas, donde se disfruta de una caminata relajada entre abedules y prados nevados hasta llegar al lago de Passet.
Experiencias après-ski, más allá de la nieve en el Pirineu de Girona
Si se buscan actividades para después del esquí, el Pirineu de Girona ofrece diferentes experiencias a lo largo de todo su territorio, como, por ejemplo:
• Sumergirse en un baño de bosque, una experiencia sensorial gastrosilvestre, en la que se realiza una inmersión en la biodiversidad del entorno, a través de un paseo tranquilo que invita a conectar y fortalecer el vínculo con la naturaleza.
• Disfrutar de una experiencia a vista de pájaro, como la que se disfruta mientras se sobrevuela la tierra de los volcanes, en la zona de La Garrotxa. Un viaje en globo complementado con un desayuno payés con productos de la tierra, mientras se contempla desde el aire, los más de 40 volcanes que conforman el parque natural de esta zona volcánica.
• Si se buscan opciones de turismo activo, se puede por ejemplo, recorrer en bici la vía verde en Sant Joan de les Abadesses, a través del albergue Ruta del Hierro que ofrece alojamiento, media pensión y alquiler de bicicleta, una experiencia ideal para toda la familia.
• Por último, el Pirineu de Girona posee una gran riqueza cultural y legado histórico que se puede conocer a través de diversas rutas para adentrase en el pasado del territorio. Ejemplo de ello son por ejemplo la Ruta de Tierra de condes y obispos y la Ruta de las Llaves de las Iglesias, en la Cerdanya, que permite conocer los secretos mejor guardados de sus iglesias y descubrir rincones ocultos tras las portadas de estos recintos sagrados y observar todo el esplendor de sus interiores.
Recordamos que fuera de la temporada, estas estaciones se convierten en centros de ocio y de actividades de montaña, donde poder disfrutar de deportes como, el senderismo, el alpinismo, las rutas en BTT y la hípica, entre otros.
¡ A disfrutar de la nieve que lo estábamos esperando!