
Hoy os presentamos a @parenthese_secretplace “Me llamo Catherine, un nombre acabado en «ine» como todas las chicas de 1960, Corinne, Christine, Caroline…
Pertenezco a una generación bendecida por los dioses.
Cuando era niña, los periódicos decían que en 2020 iríamos a la luna durante un fin de semana.
No fui a la luna pero…
Mis padres me despertaron en mitad de la noche para ver a Armstrong caminando por la luna.
Me hubiera gustado ser Claude en el Club de los 5.
Tuve mis primeras experiencias sexuales completas, protegida por la píldora
Llevaba sujetadores o no, minifaldas sin ningún tipo de debate.
He estado enamorada, he dejado a los hombres, he encontrado otro amor.
Decidí estudiar o no, trabajar, ganarme la vida.
Asumí la responsabilidad de mis decisiones.
He abrazado, besado, abrazado, besado.
He viajado.
Me vestía como quería, baba, punk, preppy, working girl.
Tenía opiniones sobre todo, la sociedad, la política…
Fui feliz, infeliz, a veces me sentía realizada, a veces no tanto.
Hoy, en la época en que mi abuela se asentaba en la vejez…
Camino descalza o en Converse.
Me encanta sentarme en el suelo.
Canto a pleno pulmón en mi baño o por la noche con mis amigos.
Bailo frente al espejo o hasta el final de la noche.
Me visto como quiero.
Me río mucho, también lloro.
Almuerzo con mis amigas para hablar de moda y de chicos.
Creo en los seres humanos.
Nunca me aburro, demasiados deseos, demasiadas ideas.
Me gusta la elegancia, especialmente la del corazón.
Me olvido de peinarme.
Tengo un mantra: «soñar, reír, amar».
Acepto mis canas, mis arrugas e incluso mis dientes de la felicidad.
Como de forma saludable, pero a veces bebo y fumo más de lo que debería.
A veces soy una snob, soy parisina…
Llevo lápiz de labios.
Creo en la juventud, la encuentro fabulosa.
Hago yoga y cerámica
A veces hago locuras como abrir mi concept store “Parenthèse» en un pequeño pueblo de La Provenza.
Quiero a mi enamorado, a mis sobrinos, a mi familia y a mis amigos con pasión.
Me encantan las discusiones interminables.
Hago lo que quiero.
Me atrevo.
Estoy deslumbrada, asombrada, siempre soñando.
Tengo casi 62 años.
Puedes visitar el universo de Catherine en su página web