Las actrices baby boomers han estado particularmente presentes en este certamen de Cannes 2017. Normal si tenemos en cuenta que el presidente no es otro de Pedro Almodovar. Todas son maravillosas actrices y sabemos cuanto lo tienen difícil en Hollywood pasado una cierta edad.
La presión es tremenda pero hemos visto una fantástica Tilda Swinton en la película Okja producida por Netflx o Juliette Binoche , que aunque no lo parezca nada ya tiene 53 años, en Double Lover (L’amant double) y tambien en «Un beau soleil interior» de Calire Denis, Julianne Moore en Wonderstruck, Nicole Kidman hace de médico al lado de Colin Farrell en «The Killing of a Sacred» de Yorgos Lanthimos pero actúa también con maestría en la ultima película «The beguiled» de Sofia Coppola.
Poder estar en Cannes para una actriz es un privilegio único, primero para poder representar una película pero sobre todo para vivir unos instantes que nunca sabes si volverás a repetir, momentos únicos en medio de un escenario de ensueño que es la Costa AzuL, el hotel Eden Roc, le Martinez, la croisette…esto si que es glamour de verdad, glamour a la francesa con una G mayúscula.