A partir de los 50 años es muy importante hacerse chequeos médicos dado que estos estudios te permiten la prevención de trastornos o enfermedades, lo que posibilita el adelanto de consecuencias y detención del desarrollo.
¿Qué factores influyen en los chequeos médicos?
Estas pruebas depende del género, edad, historial médico y las particularidades de cada persona. Por esta razón, tu médico de atención primaria te indicará qué pruebas deberás hacer según tu caso y, además, te comentará cada cuánto tiempo deberás hacer los chequeos y análisis.
¿Qué tipos de chequeos debes realizar?
A continuación, te explicaremos qué tipos de pruebas debes realizar una vez superados los 50 años:
La mamografía
El cáncer de mama es una de las enfermedades que pueden llegar a diagnosticarse de forma precoz. Esto se debe a que se puede detectar sin que haya ningún tipo de síntoma.
Generalmente, la técnica que se emplea para su detección es la denominada mamografía, es decir, una radiografía de cada mama. A través de esta radiografía, puede observarse si existe alguna lesión pese a que pueda encontrarse en una fase muy inicial.
En la actualidad, en España, es muy recomendable someterse a este tipo de prueba cada dos años. Sobre todo para aquellas mujeres que tengan una edad comprendida entre los 50 y 70. Por otro lado, también pueden hacerse la prueba aquellas mujeres que sean jóvenes y que tengan algún rasgo genético relacionado con esta alteración.
Exámenes citológicos
Del mismo modo que el cáncer de mama, el de útero también es muy posible que se pueda detectar de forma que no haya síntomas definidos. Se aconseja que las mujeres de entre 25 y 60 años se hagan una revisión ginecológica que incluya un test. Este test es llamado «papanicolau».
Se trata de una prueba que permite determinar si existe algún tipo de lesión que pueda ser maligna y, por lo tanto, podamos tratarlo de la forma más rápida posible. Además, se lleva a cabo mediante la toma de muestras celulares de lo más hondo de la vagina y del cuello del útero.
Esta prueba debe realizarse una vez cada dos o tres años.
Prueba de sangre en las heces
Otro de los exámenes que se consideran importantes una vez llegados a esta edad es la búsqueda de sangre en las heces. Se trata de una prueba muy sencilla y solamente cuesta un par de euros. Más allá de su precio, este test permite detectar varios tumores cuanto antes y, por lo tanto, salvar numerosas vidas.
Una vez establecido el programa, la propia administración te hace llegar a casa una carta. En dicha carta, se adjuntan materiales como un bastoncillo y un sobre para poder reunir la muestra de las heces. Esta muestra deberás entregarla en tu centro de salud.
En el caso de que la prueba diese negativo, no deberás preocuparte de padecer esta enfermedad por lo menos durante un periodo de tiempo.
Colonoscopia
Si resulta ser que el examen de sangre en heces da positivo y sobre todo si tienes antedecentes familiares, es totalmente imprescindible hacerse más pruebas para determinar cuál es el origen de la sangre.
Una prueba muy normal es la colonoscopia, que se trata de un examen cuyo objetivo es la identificación de pólipos que puedan ser precancerosos o de tumores. Es muy eficaz porque la cámara lleva una pequeña pinza que puede quitarte algún pólipo. La preparación en casa es un poco molesta pero merece la pena evitar un cáncer de colón!
¿Cada cuanto? Cada dos o cinco años según caso.
Análisis de sangre
El análisis de sangre es muy conveniente debido a que puede ayudar a la detección de diversas enfermedades. Por ejemplo, puede llegar a detectar una diabetes, anemia o infecciones.
Este examen suele estar formado por una prueba de estudio hematológico, en la cual se estudian los componentes de la sangre, y otro bioquímico que se encarga de analizar marcadores como la glucemia y el ácido úrico.
Por otro lado, también se puede utilizar una muestra de orina para el diagnóstico de enfermedades renales e infecciones.
En el caso de que sufras alguna alteración, el análisis de sangre y de orina son las pruebas principales que el médico te mandará hacer. Suelen ser unos chequeos médicos que se hacen en ayunas.
La tensión
Uno de los factores de riesgo cardiovasculares es la denominada hipertensión. Aunque no presente signos aparentes, en tu interior puede estar perjudicándote. Por esta razón, es aconsejable realizar una revisión de la presión arterial a menudo.
Aquellas personas que padezcan enfermedades crónicas como diabetes o problemas de riñón, deben prestar más atención a su tensión arterial y revisársela de forma frecuente.
Revisión ocular
Una vez pasados los 40 años, el riesgo de padecer un trastorno ocular aumenta y puede que no presente síntomas, como por ejemplo el glaucoma.
Se trata de una de las causas más importantes de ceguera que hay en el mundo. Son diversas las formas en las que se puede presentar pero causan un daño en el nervio ocular llegando a provocar ceguera.
Es una manera de detectar también una degeneración macular también conocida como DMAE. Es muy importante tratarla a tiempo.
Es recomendable hacerse una revisión oftalmológica una vez cada año.
Por último, te recomendamos que también hagas chequeos médicos para revisar tu salud mental con pruebas como por ejemplo para determinar tu orientación. Muy importante programar una revisión de la próstata para los hombres mayores de 50. Y aunque os pueda parecer sorprendente se recomienda también hacerse un chequeo para prevenir de un ictus.
¿Donde acudir para estos chequeos de salud? Nosotros recomendamos tomar una cita con Sanitas porque trabajan con una gran red de centros colaboradores y no es necesario tener un seguro de salud para poder hacerlo con ellos.
