Tienes cerca una playa, piscina o río para poder meteros en el agua y refrescarte un poco. ¿Y si te animas a nadar?, ¿Será bueno o malo? ¿Perderás peso o no? ¿Cuales son los beneficios de nada a nuestra edad? Hoy vamos a interesarnos a la natación para mayores de 50 años.
Nadar después de los 50
La natación es uno de los deportes más completos que hay, ya que trabaja la musculatura de todo el cuerpo, las piernas, en especial los muslos y cuádriceps, además no incide en el gemelo, lo que os va a permitir lucir piernas sin tenerlas muy musculadas.
En cuanto a los brazos, trabaja en especial el pectoral mayor, dorsal ancho, tríceps y hombros. Esto se verá reflejado en que podréis llevar tirantes tranquilamente, los brazos ni ninguna carne de alrededor colgará.
Respecto al tronco, trabaja tanto la musculatura del tronco lo que permitirá ir más rectos y también los abdominales. Además con los giros vuestra cintura se verá reducida. Para el cuello, mientras mantengáis una buena alineación también ayudará.
Por otro lado la natación se practica en el agua, un medio ingrávido, por lo tanto no habrá impacto articular, para aquellos que sufran problemas articulares es lo más indicado, ya que los cartílagos no se verán solicitados, en especial aquellos que padezcan artrosis se verán beneficiados.
Beneficios de la natación para mayores de 50 años
¿Se puede aprender a andar despues de los 50?
Claro que si! búscate un instructor de natación experimentado que podrá darte clases de natación para adultos. Empezarás en aguas poco profundas asi que no tienes que tener miedo. Solo necesitarás un equipo de natación adecuado con bañador sencillo, no hace falta ir a la moda, un par de gafas de natación, flotadores o chalecos de flotación para ayudarte a mantener la flotabilidad y la confianza en el agua.
Nuestro consejo es que aprender a nadar lleva tiempo y práctica, más pasado los 50 años, así que sé constante y paciente contigo mismo. No te rindas si no lo logras de inmediato. Mantén una actitud positiva y sigue practicando regularmente.
Verás que si la temperatura del agua no es muy baja, ayudará a bajar la presión arterial e incluso puede ser beneficiosa para los más nerviosos.
También podrás andar en el agua, lo cual es muy interesante, te beneficiara de sus propiedades. No hay impacto y podrás caminar de frente, hacia detrás o hacia los lados, estas dos últimas opciones trabajan en especial el glúteo y las cartucheras.
Incluso te aconsejo practicar Aquagym en cualquier piscina de hotel que tenga actividades o en los centros deportivos. Esto será como hacer pesas pero sin castigar los cartílagos.
Lo más importante es tener una buena técnica para no lesionarse. En caso de que no sepás nunca es tarde para aprender. Lo mejor es contratar a un profesional para que te enseñe y amenice tus entrenamientos. Incluso los expertos siempre pueden pedir que se te corrija para evitar lesiones o malos movimientos.
Si ya sabes nadar aprovecha para nadar un par de días semanas, dejando descansar entre ambas sesiones para no cargar los tendones, en especial los de los hombros. Intentar empezar por 5 o 10 minutos e ir subiendo progresivamente.
Respecto a los estilos, siempre es mejor nadar a crol o espalda ya que son los estilos menos lesivos. El estilo de mariposa es muy duro en especial para los hombros y el de braza hay que tener cuidado con las rodillas.
¿Cual es el mejor tipo de natación para mayores de 50 años ?
No todo va a ser beneficios, aquí os mostramos unas cosas a tener en cuenta:
El estilo y la técnica son muy determinantes para recuperarse de lesiones y no justo lo contrario. En el caso del crol, si no se lleva la espalda bien alineada y se tiende a mirar hacia arriba podréis notar molestias en el cuello.
Como antes dijimos el estilo de braza puede ser perjudicial para las rodillas y también el cuello y espalda si se va con una postura muy arqueada.
El estilo de mariposa además de exigente puede resentir hombros, cuello y espalda si no se domina. La natación a espalda es el menos lesivo y solo quién tenga problemas de hombro se verá afectado.
Como veis las lesiones de hombro, en especial el «Impingement de Hombro» y la tendinopatía del manguito rotador o de uno de sus tendones, supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular pueden agravarse con la natación. Cuidado los que presenten problemas de hombro.
La natación es uno de los mejores ejercicios para la artrosis por la ausencia de impactos, justo lo contrario con la osteoporosis y problemas en la matriz ósea. Para que los huesos se regeneren correctamente o para intentar aumentar la producción de tejido óseo hacen falta estímulos con carga o impacto como andar o pesas muy ligeras.
En el agua no harás nada de esto y no es lo más recomendable para este tipo de personas.
Los que presenten tendinopatías pueden empeorar o no mejorar, los tendones necesitan de tracción constante y poca intensidad para repararse, en el agua esto no lo encontraréis.
Finalmente el agua reseca la piel y pelo, tendrás que cuidarlo un poco más. Tener cuidado en verano con los cambios bruscos de temperatura, estar mucho al sol y bañaros en un agua muy fría.
Pese a todo la natación es un ejercicio excelente y que os animamos a probar en verano en cualquier piscina o en el mar y que mantengáis el resto del año. Acompañarlo de una alimentación correcta como la que os ofrecemos en la sección de nutrición y veréis resultados.
Cualquier duda podeís contactar conmigo en el centro Fisiosesto
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¡Feliz semana!