‘amor50’

Maite, la alegría de la cocina, es Babú

maite-soybabu-cocina

Maite es un terremoto de energía, una fuente inagotable de sabias palabras, de risa contagiosa. Su pasión es cocinar; y está encantada de poder contarnos en BabúMagazine sus trucos y experiencias entre sartenes y ollas.

Maite se cuida y cuida de los suyos; tiene un montón de recetas que mezcla con historias divertidas como si fueran la mejor de las salsas para sus platos.

Le hemos pedido que se presente, que nos cuente como se siente siendo Babù y estamos seguros que os va a encantar. Nos recomendará una receta cada semana .

¡Hola Maite¡ Bienvenida a BabúMagazine.

Hola a todos, ¿cómo estáis?

Voy a presentarme, para que sepáis un poquito más de mí.

Me llamo Maite, vine a este mundo un miércoles 24 de Abril de 1957. Es decir tengo ya 59 años, ¡no puede ser! ¿Seguro que las matemáticas no fallan?

Porque digo que nací un miércoles, pues porque según la astrología los nacidos en miércoles tenemos facultades para la comunicación, pero somos dispersos y necesitamos disciplina. Está claro, o nací un miércoles que se comportaba como otro día de la semana, o la astrología falla conmigo.

Os lo juro, dispersa nada de nada y disciplina es lo único que no me falta.

Adoro la cocina, leer, caminar y charlar con los amigos ¿se nota verdad?

Pero bueno volvamos a ese 24 de Abril, llego yo, llorando y según mi madre lloré durante 18 días más, no paré de hacerlo durante el día y la noche. Me pregunto ¿no estaría deshidratada?

Siempre fui un poco trasto, inquieta por naturaleza, rebelde pero nunca tuve malas intenciones o eso creo.

Soy la mediana, una chica es la mayor y un chico el pequeño. Quizá esto me describa más, no encontraba mi sitio y estaba intentando encontrarlo.

Fui una adolescente normal, preocupada por las innumerables tonterías que se pasan por la cabeza de las personas inmaduras.

¡Qué horror! Tengo un granito, el pantalón no me cierra, el pelo se riza, etc. Grandes preocupaciones para un cerebro en construcción. Si fuese ahora habría ido a Ikea para que lo hubiesen amueblado adecuadamente.

Menos mal que la adolescencia dura poco, que es como un sarampión.

Durante este proceso de cambio termine mis estudios y comencé a trabajar en un Banco. Aleluya, en aquella época buen salario y buen horario, después con los años vendría Paco con las rebajas.

Y llegó la boda, con 26 años me casé.

Después vinieron mis hijos, en un año exacto tuve a los dos, dos auténticos terremotos, en particular a la hora de dormir, pero tuve la enorme suerte de contar con mis padres que me ayudaron no solo a conciliar vida laboral y familiar, si no que educaron a mis hijos, siendo estrictos, con responsabilidad pero con un cariño como nunca lo había visto.

Mis hijos fueron creciendo y los inconvenientes también. Aquí si comprendí lo que mis padres habían pasado con nosotros. Que duro es cuando empiezan a volar, cuando llegan tarde y hasta que no sientes como se abre la puerta, no puedes dormir. La verdad es que en otros aspectos no he podido quejarme.

Y el tiempo continuó su marcha imparable y hoy ya solo convive conmigo uno de mis hijos, porque el otro ya ha volado.

Mis hijos crecían y mis padres envejecían. Tienen 91 y 85 años, aún los tengo, pochitos, pero los tengo y puedo demostrarles que todo lo que me dieron no fue en vano, ahora los cuidamos nosotros, y mis hijos con sus atenciones les devuelven todo el cariño recibido.

Os preguntareis ¿y ahora, a tus 59 años que tienes que hacer?

Pues de todo, la vida no ha hecho más que empezar.  

1 de 2 Seguir leyendo >

4 Comentarios
  1. Maite eres alegre, eres feliz.
    Gracias a tí, he aprendido que la aventura de la vida es aprender, el objetivo que persigo todos los días es crecer. No podemos luchar contra la naturaleza de la vida que es cambiar.
    Gracias por compartir tu secreto siempre con todos nosotros: ATREVERSE.

    Como todo lo que he aprendido no es suficiente ahora seré fan incondicional de tu cocina!!!

    Gracias Maite.

    Una vieja amiga: María M.G.

    1. María, sigue atreviéndote como has hecho siempre, llegarás lejos. Espero que me sigas para que no abandones la cocina. Un beso grande.

  2. Es una mujer espectacular hace unos 20años q la conozco la conoci en el banco yo trabajo en la limpieza y desde el primer dia me trato como una mas de ellos (no como otros)me encantaba q me diera sus recetas y sus postres estan para chuparse los dedos aunque llevo algun tiempo sin verte muchas veces me acuerdo de ti muchos besos maite y no cambies nunca

    1. Tere cariño, no son 20, que son 30; te recuerdo que te traté como te mereces porque eres una señora.Yo también me acuerdo mucho de ti.Un beso

Dejar una respuesta

Tu dirección de email no será publicada.

Puedes usar estas etiquetas y atributos de HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>