¡Hola Babús! ¿Cómo estáis? Esta semana nos toca hamburguesas de quinoa . Los día están siendo duros, por el frío; pero estamos en Enero y es normal que sea así. La verdad no sé qué me pasa, porque era una persona extremadamente calurosa y en cambio ahora soy enormemente friolera. ¿Será la edad? No, es que se ha estropeado mi termostato.
Ya os dije que iba a la revisión con mi endocrina y las cosas marchan. Todo lo que he perdido lo he perdido de grasa y es verdad que he reducido mucho el volúmen.
Ya me han puesto una vez a la semana lentejas o quinoa. Pero fijaros si como lentejas es con verduras y tengo que añadir pan, para que sea un plato completo. Si en cambio tomo quinoa con verduras no tengo que añadir nada, porque por sí mismo es un plato completo.
La quinoa sigue siendo una gran desconocida en nuestras mesas, con las cualidades nutritivas que tiene.
Le comentaba a la doctora que yo rehogo pimiento verde y rojo con un poco de cebolla y añado la quinoa y soy la persona más feliz del mundo. Vamos a por la receta.
Ingredientes para 4 personas:
- 1 bolsa de 250 grs. De quinoa congelada
- 1 bolsa de pimiento rojo y verde congelada
- 2 cebollas
- Aceite de oliva
- Pan rallado un paquete
- 2 dientes de ajo
- Perejil
- 2 huevos
- Sal
- Una bolsa de ensalada variada
- Rúcola
- 8 tomates cherry
Descongelamos los pimientos en un escurridor. Picamos muy fina la cebolla.
Colocamos una sartén con aceite en el fondo. Rehogamos la cebolla a fuego bajo (5) con un poco de sal, hasta que estén bien pasadas.
Añadimos los pimientos, echamos un poquito de sal y seguimos rehogando a fuego bajo. Cuando tenemos todo rehogado añadimos la quinoa y rehogamos un par de minutos. Tener en cuenta que no añadimos ningún líquido para que nos quede espeso.
Volcamos en una fuente y cuando está templado, le añadimos los dientes de ajos machacados y perejil cortado muy finito.
Añadimos un huevo y pan rallado, mezclando todo perfectamente hasta que nos quede una masa homogénea.
Comenzamos a hacer las hamburguesas. Las tenemos que hacer pequeñas porque si no se romperían.
Batimos el otro huevo. Colocamos pan rallado en un plato. Pasamos las hamburguesas primero por huevo y después por pan rallado y las freímos en una sartén con el fondo cubierto de aceite.
Daros cuenta que no tenemos que freír si no simplemente que cojan color nuestras hamburguesas.
Las servimos con una ensalada, rúcola y tomates cherrys. La ensalada variada es la que tiene berros, lechuga de roble, lechuga normal y lechuga roja. Está buenísima.
¿Qué cualidades tiene este plato?
- Quinoa cuyas propiedades comentaba la semana pasada
- Pimiento rojo que es un poderoso anticancerígeno, contiene vitamina C, vitamina B6 y magnesio, son buenos para la vista y contienen sustancias antioxidantes.
- Pimiento verde, rico en vitamina C y bajo en calorías. Es recomendable para la piel, vista y aparato respiratorio. El pimiento verde es el pimiento rojo en sus fases tempranas.
- Cebolla, una de sus mejores propiedades es su efecto diurético queridos baby boomers.
- Ajo, uno de sus componentes es la alcina, que es el principio que se cree responsable de todos los beneficios que aporta a nuestra salud.
- Perejil, calma la flatulencia, el dolor de estómago e incluso los cólicos.
- El huevo con sus proteínas que aportan los aminoácidos necesarios en nuestro día a día. Ayuda a prevenir la degeneración macular.
¿Qué os parece? , y encima no es que estén buenas, están buenísimas. Como veréis continuamos nuestra marcha de comer sano.
Pensando en el ajo, recordaba que Isabel La Católica no soportaba el ajo, y en una comida trataron de ponérselo camuflado entre el perejil creyendo que no se daría cuenta. ¿Sabéis que dijo la Reina cuando cató el plato? “Venía el villano vestido de verde”, frase que pasó a la historia por su contenido.
Os espero nuevamente la semana que viene con recetas sanas, fáciles y ricas que nos ayuden en nuestra cruzada con la operación biquini. Hasta la semana que viene.
Os quiero.
